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Café y salud
Por ANULFO MATEO PEREZ
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El café es un artículo obligado de la canasta familiar y el consumo diario de casi todos los hogares dominicanos, se degusta por su sabor y aroma (enfatizados en la publicidad); el acto de tomarlo se acompaña del intercambio social y de un ritual muy singular que nos recuerda el consumo del mate y el té.
Sin embargo, un nuevo estudio advierte que tomar café en exceso podría aumentar el riesgo de mortalidad por cualquier causa, subrayando que el exceso en el consumo de café puede ser un asesino potencial.
La investigación se realizó a gran escala, pues contó con la participación de 50 mil personas, de entre 20 y 87 años, grupo con el cual se determinó que el consumo excesivo de esa bebida puede ser nocivo.
Las características tóxicas del café se conocieron en 1440, cuando un pastor etíope notó cómo su rebaño se había mostrado intranquilo durante la noche, después de ingerir los frutos de unos arbustos silvestres.
El principio activo del café es la trimetilxantina, mejor conocida como cafeína, cuya concentración en relación al peso es de 1 al 2 por ciento y se encuentra en menor proporción en el cacao y el té.
La cafeína se absorbe por la mucosa del estómago y del intestino, y se elimina de forma rápida y prácticamente sin modificar a través de la bilis y la orina, por lo que es frecuente la irritación de la vejiga.
Al igual que el tabaco, su acción sobre el sistema nervioso provoca elevación significativa de los neurotransmisores (facilitadores del impulso nervioso de una neurona a otra) y excitación generalizada.
Es conveniente conocer que el café (la trimetilxantina) actúa con exquisita preferencia en el Sistema Reticular Activador (SRA), situado en el tallo cerebral, provocando de igual manera alertamiento e insomnio.