
Creador de compañía cubana La Colmenita comparte sueños en República Dominicana
Por Prensa Latina
SANTO DOMINGO.- El director general de la compañía cubana de teatro infantil La Colmenita, Carlos Alberto Cremata, compartió hoy la génesis y esencia de este proyecto con estudiantes y catedráticos reunidos en la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Con enseñanzas que van más allá de juegos infantiles y canciones, Cremata, con “sus abejitas”, transmite la esencia martiana para ser mejores seres humanos.
Durante el ameno intercambio que se extendió por más de una hora, el pedagogo reveló la esencia del extraordinario modelo pedagógico y teatral que tiene en el Héroe Nacional de Cuba, José Martí, una guía para ser mejores personas.
“Nosotros priorizamos la formación de valores (solidaridad, honestidad, humildad) a través del teatro, de la comedia musical; el teatro no es el fin, sino el medio, e intentamos crecer con José Martí”, afirmó al exponer el método de trabajo del colectivo fundado por él en 1990.
Explicó que “el primer valor humano que estudiamos es la sinceridad” porque si los Versos Sencillos de Martí comienzan con Yo soy un hombre Sincero, pues de lo que se trata es de pensar y reflexionar sobre el significado de esa expresión, para crecer con Martí, junto a Martí.
Explicó que la agrupación cuenta con un taller extraordinario que se llama “Crecer con Martí”, en el cual se trabajan los valores y textos del Maestro.
Cremata habla con emoción de este hermoso proyecto, extendido a todos los municipios de su país, y comenta que en 1990 adoptaron una frase del Apóstol que le da sentido al grupo: “Los niños debían juntarse una vez por lo menos a la semana, para ver a quien podrían hacerle algún bien, todos juntos».
Señaló que así empezaron a encontrarse con los niños una vez a la semana, pero el objetivo era hacer el bien todos los días de manera consciente, levantarse y vivir todos los días con la sed imperiosa de hacer buenas acciones.
Los niños nos cuentan el bien que han hecho en el tiempo que no nos hemos visto, que siempre son horas, pero le decimos que tenemos que contárnoslo como secreto de pandilla porque José Martí decía que “las cosas buenas se han de hacer sin llamar al universo para que lo vea a uno pasar”.
Cremata puede hablar horas y horas del grupo teatral y de sus colmeneros, de las colmenitas fundadas en otros países, de sueños y proyectos, con la certeza de que el auditorio disfruta cada una de sus anécdotas.
Acompañaron a Cremata el embajador de Cuba en República Dominicana, Ángel Arzuaga, la directora de Relaciones Internacionales de La Colmenita, Lizette Martínez, la profesora “colmenera” Marta Palacios, así como miembros de la misión diplomática y sus familiares.
A los presentes les comentó sobre la idea de hacer una colmenita con niños dominicanos, en la que participen también pequeños cubanos; habló de su visita a la escuela República de Cuba, en Santo Domingo, y al politécnico Máximo Gómez, construido por iniciativa del líder histórico de la Revolución Fidel Castro en Baní, la tierra del Generalísimo Máximo Gómez.
Pensamos que podemos hacer unas colmenitas “pilotos” en esos centros de enseñanza con dos maestras nuestras, adelantó, y luego prometió a los presentes traer muy pronto a la agrupación a República Dominicana.
La Colmenita es uno de los proyectos más nobles y humanos materializados con niños en Cuba con el empeño de un gran colectivo, familias, pueblo, Gobierno, y sobre todo de su fundador, un hombre incansable que no deja de soñar y de crear.