Este Abril
Por NARCISO ISA CONDE
Este abril amerita un homenaje diferente: acción, lucha, indignación… el Cibao en huelga mañana lunes. Valen las ofrendas, conferencias, paneles, testimonios, exaltación de la gesta. Valen las visitas a las tumbas de los héroes y heroínas. Pero es insuficientes. Hay que ir más allá del recuerdo. Necesitamos poner la memoria histórica, sus inmensos valores, magníficos ejemplos y dinámica insumisa, en el presente y cara al futuro.
Abril 65 fue una revolución popular y democrática, unidad cívico-militar contra la negación de derechos y libertades, guerra patria contra el yanqui invasor. Ejercicio de democracia real, poder popular constituyente y autodeterminación, todavía pendientes de conquistar. Abril 65 fue lucha y debe conmemorarse con nuevas luchas por ideales y metas parecidas, debidamente actualizadas y enriquecidas.
Por eso va mañana la huelga regional del Cibao. Magnífica iniciativa. Una forma de ejercer soberanía popular por encima de la cháchara electorera de actores políticos que, pese a su digno origen en el preámbulo y despliegue de esa epopeya, han venido convirtiéndose en lo contrario, traicionando sus valores y propósitos.
Sí, fuerzas políticas que jugaron papeles estelares en aquel Abril Heroico, al paso de los años y de la entronización de esta prolongada contra-revolución imperialista, han devenido en otra cosa: tanto aquellas procedentes del tronco PRD (PLD, FP, PRM, asaltadas por mafias), como una parte de las izquierdas y el progresismo de entonces, ya despojadas de políticas transformadoras.
El impacto de la invasión gringa y el neo-conservadurismo las ablandó o derechizó, las llevó a conciliar e integrarse de alguna manera al sistema establecido en la posguerra, a sus reglas de juego y formas de hacer política; negándose a subvertir un ordenamiento jurídico-político-institucional “made in usa”, negador de derechos y democracia real, de soberanía popular y autodeterminación nacional. Inserto en un lumpen capitalismo.
Partidocracia corrompida y plutocracia insolente y voraz (poder del dinero), se han agregado para pervertir, degradar y manipular todo: política, economía, religión, relaciones de género, salud, educaciòn, medio ambiente, naturaleza…Y de ahí brota el presente clamor cibaeño de mañana: ¡Comida barata! ¡Empleos y salarios dignos! ¡Salud, Educación y Agua de calidad! ¡Ambiente Sano! ¡Tres causales y alto a los feminicidios! ¡Loma Miranda-Parque Nacional! ¡No más ARS, AFP, APPS, fideicomisos, ni megamineras criminales! ¡Alto a las privatizaciones!.
Esta realidad “está demandando una izquierda-izquierda, que estrechamente unida a los movimientos sociales en lucha, desarrolle como primer paso, un movimiento político-social transformador, que a la vez se proponga impulsar desde la soberanía popular un proceso constituyente hacia una nueva Constitución, nueva institucionalidad y autodeterminación nacional”