La muerte en el recodo

Por Emmanuel Abreu Reyes

Recordando la promesa que hice de escribir una serie de anécdotas y  cuentos, que puedan ser una expresión del tiempo en la que fueron escritos, sobre todo que a diferencia de otros muy conocidos, este se trata de contar cosas de la vida real, alejándose de la ficción, ya que en los tiempos que vivimos, la realidad va delante de la ficción.

La pareja de esposo había llegado a su casa, agotados después de un intenso día de trabajo; ella trabajaba en el Hospital de las Fuerzas Armadas, con rango de primer teniente médico, y él se desempeñaba como dueño de un negocio de préstamos, compra y venta de monedas extranjeras, especialmente dólares.

-Mi amor como te fue hoy en el trabajo…. muchos pacientes, ya sabes que en ese hospital nada funciona bien, y no se trata igual a la familia de un raso, que a la de un coronel… considero eso injusto, porque los pacientes y las enfermedades son iguales para todos. Los médicos que pensamos como yo somos mal vistos por los jefes. Pero a mí no me importa; yo actúo con mi conciencia. ¿Y a ti como te fue?

-Muy bien; entraron muchos dividendos hoy, sobre todo en dólares, pero hay que tener cuidado con la procedencia, ya que está entrando mucho dinero del narcotráfico, y uno podría verse involucrado…

Mientras tanto había comenzado a oscurecer…. El esposo de la señora le preguntó

-Ustedes, a qué hora se van; mañana será otro día.

-Nosotros no tenemos a donde dormir. Señor, ¿usted podría dejarnos dormir en el parque? Asi comenzamos a trabajar más temprano, dijeron los obreros haitianos.

-Pero, ¿ustedes cenaron?

-No señor; compraremos pan y sardina en el colmado.

-No, espérense, que ahí hay arroz y carne que mi esposa ni yo vamos a comer; cómanselo ustedes, y cojan un par de vaso de ese yumbo para que bajen el arroz.

-Gracias señor, dijo el más locuaz de los haitianos, que llevaban unos 5 días trabajando en la casa del recodo. En eso la joven señora estaba bañando al niño para acostarlo.

-¿ Y cómo te fue hoy con la abuela?

-Bien, pero ella no me deja jugar como yo quiero, me quería bañar en una  piscina, yo solo y no me dejó

-Mi niño, pero tu abuela lo que está es cuidándote

-Mami, pero ya yo soy grande, y me se cuidar.

-Está bien, yo hablaré con ella para que te vigile medio de lejos. Dentro de poco te pondré en la escuela, para que inicies el proceso de tu alfabetización.

-¡Ay mami!, yo quiero ya estar en la escuela para tener amiguitos y amiguitas. Había premoniciones de la tragedia. La doctora le contó a su marido, que la noche anterior había tenido un sueño muy malo, que era algo de una tragedia en donde unos jabalíes peleaban entre sí, y se desangraban a mordiscos, y usando las pezuñas.

-Esos sueños no quieren decir nada, sueños, sueños son

-Bueno mi amor, dijo ella, cuando mataron a García Lorca en el gobierno de Francisco Franco, el presintió su muerte, y esa noche vio en sueños, así mismo a uno cerdos y jabalíes peleando hasta emitir una enorme cantidad de sangre, en medio de ruidos infernales, el despertó bañado en sudor, al otro día lo mataron, ya que él estaba en contra del gobierno de Francisco Franco.

-Duérmete ya mi linda, que mañana tenemos una jornada muy fuerte.

En la mañana, el niño se despertó y levantó de la cama, a pesar de sus escasos años, notó que su mamá no fue a despertarlo. Cuando se dirigió a la sala, encontró sangre esparcida por donde quiera y vio a su padre y a su madre con la cabeza destrozada, habían sido golpeados con blok de los de construcción. El niño levantó el teléfono, y le dijo a su abuela:

-¡Abuela Aquí, hay sangre por todos lados, ven seguido!

Los haitianos ya se habían ido. Obvio eran los principales sospechosos. Fueron encarcelados en la cárcel de La Victoria, luego supimos que uno había sido asesinado por otro recluso, del otro no se supo nada, y hasta la fecha se desconoce el móvil de este crimen, si lo cometieron realmente los haitiano.

Si hay autores intelectuales relacionados con el tipo de negocio que hacía el esposo de la doctora.

Este y tantos otros crímenes se quedan impunes en este macondiano país. ¿Habría sido para robar? ¿Fueron realmente los haitianos que realizaban trabajos de reconstrucción en la casa de la pareja.

Cuando ayer pasé por el recodo que contenía, en cuanto a la cantidad de terreno se refiere, una de las casas más grandes del sector, una gran tristeza me invadió al recordar a este niño que tendrá ahora unos 21 años; su trauma fue inmenso, fue necesario tratamiento psicológico por varios años.

Veía por las noches, el rio de sangre emanado de los cuerpos de sus padres muertos, golpeados hasta morir con un block, después de dormir plácidamente, después de una ardua jornada de trabajo.

La casa luce abandonada, llena de basuras en la marquesina.

Nadie la alquila, porque se sabe lo que allí aconteció al comienzo del año 2000. Y si por error la arriendan, desde que la gente se entera de lo que allí aconteció, de inmediato se mudarían y hasta pierden los depósitos para poder desprenderse más rápido de todo lo que significa esa vivienda y ese recodo.

Son reiterados los comentarios de guardianes que se quejan de que la vivienda la arriendan, y desde que la gente se entera de lo que allí ocurrió, de inmediato se mudan y hasta dejan el depósito de dinero, para poder desprenderse más rápido de todo lo que suponga como gualda-espalda de militares que viven muy cerca de la casa, la cual ya le llaman que está embrujada, y algunos refieren que han escuchado gritos espantosos .

• El autor es médico cirujano y abogado.